Maestría en Desarrollo Rural - UNA

¿Quiénes somos?

La Maestría en Desarrollo Rural es un programa académico de posgrado conducente al título de Magister Scientiae en Desarrollo Rural. Desde mediados de la década de los 70 se planteó realizar un posgrado en extensión y desarrollo rural, iniciativa que se retomó posteriormente con base en importantes experiencias de varias unidades académicas, acumuladas desde la fundación de la UNA en 1973.

El programa evolucionó para entender las necesidades de estudiantes que se encuentran trabajando en diferentes regiones rurales de América Latina y que no pueden desplazarse a centros urbanos o a Costa Rica. Los cursos y actividades académicas se administran desde plataformas ubicadas en Texas, Estados Unidos, lejos de condiciones climáticas adversas, con el fin de garantizar conexión permanente a los diferentes usuarios en América 24/7.

El último aval de la modificación de la malla curricular, realizando cambios sustantivos en los cursos que se imparten durante los 6 trimestres de la carrera se dio en diciembre 2016, aprobado en el oficio UNA-VD-OFIC-170-2016 de la Vicerrectoría de Docencia.

Modalidad Virtual
Los avances tecnológicos están transformando constantemente las industrias, las estrategias de desarrollo de las organizaciones y las formas de interrelación de los seres humanos. Cada día, son más las personas que están conectadas al mundo desde un móvil o un computador. Esta hiperconectvidad trae consigo muchas ventajas, una de las cuales es la posibilidad de la formación continua y actualización profesional, a través del ecosistema de herramientas para el aprendizaje en línea, proceso del cual se citan los siguientes beneficios:

• Facilita el intercambio y construcción de conocimiento a través de la participación simultánea de profesionales de diferentes disciplinas, organizaciones y países.
• Permite a los estudiantes laborar y estudiar de forma paralela.
• Posibilita la construcción de comunidades virtuales de aprendizaje continuo e intercambio de experiencias.
• Impulsa un ahorro de tiempo y recursos requeridos para el transporte de estudiantes con un impacto ambiental positivo.
• Fomenta la evaluación continua y seguimiento del estudiantado.
• Promueve la distribución inmediata de recursos digitales a un bajo costo.
• Se construyen bancos de herramientas de aprendizaje muy útiles para el quehacer de las organizaciones.
• Propicia la autoformación y espacios de trabajo colaborativos.
• Democratiza el acceso a los espacios formativos de educación superior.